Berenice se corta el pelo, de Scott Fitzgerald

 
 
Bernice Bobs Her Hair, en inglés. ¿Qué es "bobs"? No sé exactamente, pero se refiere al pelo cortado como un chico: corto y con la nuca al descubierto. El cuento es de 1920. La moda la puso en marcha Irene Castle, que era una bailarina. Las primeras en cortarse el pelo así de corto fueron las conductoras de ambulancias durante la Primera Guerra Mundial. Pero entonces esas conductoras se cortaron el pelo en Europa, ¿no? Pues sí, francesas. El "bob" lo inventaron las francesas. Había habido un primer intento en las sufragistas de principios del veinte, pero entonces era demasiado radical como para ser aceptado mayoritariamente. Estalló la guerra y las chicas lo incorporaron con la excusa de la higiene y las dificultades de la guerra. Y después llegaron los años 20 y los años locos en Estados Unidos. En cualquier caso, el bob es un símbolo de la libertad de las mujeres al que Fitzgerald da la vuelta de forma perversa. Lo convierte en justo lo contrario. Bernice, para competir con su prima Marjorie, termina cortándose el pelo a tazón en contra de su voluntad, sólo para ser fiel a una promesa social con la que ha conseguido crear atención a su alrededor por parte de los hombres. Mujer-objeto que cuanto más "libre" parece más "objeto" es. La ironía de Fitzgerald en relación al feminismo es muy afilada. Es consciente de la debilidad extrema de las mujeres y parece entenderlas muy bien. A veces me recuerda a Truman Capote. El cuento, de hecho, está inspirado en las cartas que Scott le mandaba a su hermana para que fuera más atractiva a los chicos. Consejos perversos. Consejos de rendición. Consejos de triunfo. ¿Qué es triunfar? ¿Qué es perder? Está sobrevolando la noción de fracaso y soledad, y en peligro la de independencia y libertad interior. A través de un pequeño episodio Fitzgerald intuye lo que va a ser la futura sociedad de consumo: falsa libertad. Libertad para ser aquello que el sistema quiere que seas. Fitzgerald no hace esa crítica de forma evidente. No hace falta. Analiza tan bien la presión que sufre el individuo para poder integrarse en esa sociedad bestial que va quedando todo clarísimo. Es agotador sólo pensarlo. Es importante también porque son adolescentes. Aunque los personajes tengan veinte años tienen la dependencia de los adolescentes, sus caprichos, su falta de reservas y su ingenuidad altiva. Siente el dolor de ver lo mejor de los suyos derramándose y pudriéndose bajo el peso de la sociabilidad basada en el poder de la apariencia.

Comentarios

  1. Considero que este es un buen análisis del cuento. Llegué aquí por casualidad, buscando un lugar donde descargar este cuento y bueno, al leer tu comentario de el solo me han dado más ganas de leerlo. Saludos.

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