Individuo y serie

Desde los inicios de la Revolución Industrial se sabe que la producción en serie es garantía de éxito empresarial. Trabajar sobre encargos individuales exclusivos es sólo rentable cuando el precio es muy alto, y eso se lleva haciendo desde el Neolítico. Al fin y al cabo, la modernidad no se caracteriza por el lujo, sino por el standard, por la elevación de la media y por el consumo. Esa media tiene que existir. Sucede que esa venta serial produce un cansancio, un "malestar". La alienación del consumidor tiene un límite. Para que ese límite no se evidencie se inventó la customización, la moda, el usar y tirar, y todo el resto del tinglado. Lo que no se habla nunca es el paso anterior, el del márketing sobre una sociedad no consumidora. Ese proceso de creación de un magma comprador es violento de principio, y requiere fuerte control social. Hoy en día un tercio de la Humanidad está pasando del horror de la miseria al horror de la reprogramación con miras al consumo masivo. El tercio restante continúa en la miseria sin que parezca que vaya a haber cambios inminentes. Y el tercio ya establecido en esas sociedad de consumo -podamos o no consumir por nuestro nivel adquisitivo, pero inmersos en ese paradigma- muestra también signos de cansancio evidentes. Quizás estemos llegando al final de la era del consumo iniciada tras la Segunda Guerra Mundial y estemos entrando en otra etapa, poco a poco. Quizás sea el decrecimiento, quizás la democracia directa, quizás... No sé. Otra cosa. Pero sea la que sea va a convivir durante décadas con las sociedades que ahora están entrando de lleno en la cultura del consumo, sobre todo China e India. Me pregunto cómo se producirá esa convivencia.

             Otra pregunta sobre el futuro que me intriga es el de las drogas. ¿Cómo serán las drogas del futuro? ¿Drogas mejoradas? Vinge habla de esas drogas perfectas, que no tienen efectos secundarios. De hecho, las metanfetaminas ya son algo parecido a esto. Son "drogas de diseño": fáciles de producir y sin necesidad de una materia prima natural costosa. Serán drogas diseñadas para determinadas actividades. Drogas serviciales, dóciles, divertidas, no dañinas para el organismo. Por supuesto, seguirá habiendo drogas "místicas", de las más antiguas y naturales. En realidad, creo que las drogas se frivolizarán, y pasarán a formar parte de la farmacología. Lo que pasa es que la propia farmacología va a entrar en crisis dado que las terapias génicas van a dejar sin sentido la venta de "medicamentos". ¿Qué haremos, entonces? ¿Drogas individuales? Pero al fin y al cabo, si le pides algo muy concreto a una droga estás matando la sorpresa. Me acuerdo de una amiga que buscaba con sus colegas las peores pastillas del barrio para sorprenderse con la mierda con la que las cortaban, porque las buenas ya sabían lo que hacían y les aburría. Me pareció una historia maravillosa, que en realidad refleja un comportamiento generalizado en cuanto a lecturas, comida, etc... el consumo basura como huida hacia adelante ante un ambiente de cuasi absoluta previsibilidad. En realidad estamos hablando de tedio. El tedio del consumidor estabulado. ¿Tenían razón los románticos y esta es la consecuencia inevitable de la racionalidad triunfante: el tedio masivo? Al fin y al cabo el suicidio está escalando puestos como causa de muerte a velocidad de vértigo. No para de subir. En todo el mundo.